(ENEMPPL - 2018) La tolerancia es la capacidad de conceder la misma importancia a la forma de ser, de pensar y de vivir de los dems que a nuestra propia manera de ser, de pensar y de vivir. Si entendemos que nuestras creencias y costumbres no son ni mejores ni peores que las de otras personas, sino simplemente distintas, estaremos respetando a los dems. Compartir las diferencias nos enriquece, nos hace ms grandes. Algunas veces, a lo largo del tiempo se pueden observar una serie de ejemplos de individuos, cuyas formas de actuar se originan precisamente de la falta de respeto hacia los dems. El dejar pasar actitudes desconsideradas e injustas es una forma indirecta de no respetar a quien las sufre y de no importarnos en lo absoluto. Por eso, ser tolerante es tambin definirse, dar un paso al frente, hacer una opcin por la justicia y la paz. DE LAI, J. Disponvel em: www.elobservatodo.cl. Acesso em: 9 ago. 2013 (adaptado). O texto discute o sentido de tolerncia. Nele, esse sentido assume um papel social, uma vez que a tolerncia
(ENEM PPL - 2018) Incivismo Pasear por el centro de Barcelona (Espaa) de noche implica, a ciencia cierta, tropezarse con, por ejemplo, jvenes bebiendo en portales y plazas, con alguno de ellos aliviando la vejiga en las esquinas... La orden para la polica local ha sido la de multiplicar la ofensiva contra la falta de civismo, combatindose tambin, por lo tanto, las molestias callejeras que perturban el sueo. Y, aunque no hay milagros, las cifras ya constatan el esfuerzo de este ao por poner un freno. Con respecto a las molestias (ruidos, peleas, msica a altas horas en la va pblica), las multas se han multiplicado por cuatro. Las multas por consumir alcohol en la calle superan ya las 5 000 este verano. CASTN, P. Disponvel em: www.elperiodico.com. Acesso em: 25 ago. 2011 (adaptado). Para combater a falta de civismo, a polcia da cidade de Barcelona tem
(ENEM PPL - 2018) Con una chacra de Portezuelo como escenario, algunos dirigentes frentistas se reunieron para evaluar el estado de la coalicin de gobierno y discutir estrategias para las elecciones del ao prximo. Ministros de Estado, legisladores y sindicalistas departieron all sobre alineamientos electorales dentro del Frente Amplio. Los acompa en la ocasin el rector de la Universidad de la Repblica, Rodrigo Arocena, un funcionario que por su investidura debera mostrar menos la hilacha y cuidarse de aparecer vinculado a confabulaciones y maniobras de poltica partidaria. Disponvel em: http://historico.elpais.com.uy. Acesso em: 20 nov. 2013. No texto do jornal uruguaio, o autor utiliza a expresso idiomtica mostrar menos la hilacha para sugerir que o reitor da universidade deve
(ENEM PPL - 2018) Eduardo Galeano 1976 Libertad Pjaros prohibidos Los presos polticos uruguayos no pueden hablar sin permiso, silbar, sonrer, cantar, caminar rpido ni saludar a otro preso. Tampoco pueden dibujar ni recibir dibujos de mujeres embarazadas, parejas, mariposas, estrellas ni pjaros. Didask Prez, maestro de escuela, torturado y preso por tener ideas ideolgicas, recibe un domingo la visita de su hija Milay, de cinco aos. La hija le trae un dibujo de pjaros. Los censores se lo rompen en la entrada a la crcel. El domingo siguiente, Milay le trae un dibujo de rboles. Los rboles no estn prohibidos, y el domingo pasa. Didashk le elogia la obra y le pregunta por los circulitos de colores que aparecen en la copa de los rboles, muchos pequeos crculos entre las ramas: Son naranjas? qu frutas son? La nia lo hace callar: Ssssshhhh. Y en secreto le explica: Bobo, no ves que son ojos? Los ojos de los pjaros que te traje a escondidas. GALEANO, E. Memoria del fuego III. El siglo del viento. Madrid: Siglo Veintiuno de Espaa, 1986. A narrativa desse conto, que tem como pano de fundo a ditadura militar uruguaia, revela a
(ENEM PPL - 2018) VIII agosto Champandongo Ojal que a Rosaura la boca se le hiciera chicharrn! Y que nunca hubiera dejado escapar esas repugnantes, malolientes, incoherentes, pestilentes, indecentes y repelentes palabras. En fin, no saba por qu tena que pensar en esas cosas tan desagradables en estos momentos que deberan ser para ella los ms felices de su vida, ni saba por qu estaba tan molesta. Y ojal que ella viviera lo suficiente como para impedir que su hermana llevara a cabo tan nefastas intenciones. Nadie se explicaba este comportamiento, algunos crean que era porque le haba afectado profundamente la idea de no volver a tener ms hijos. Por lo que fuera, pero tal pareca que la ira dominaba los pensamientos y las acciones de todos en la casa. Tita estaba literalmente como agua para chocolate. ESQUIVEL, L. Como agua para chocolate. Buenos Aires: Debolsillo, 2005. Laura Esquivel, em sua obra, trata, entre outros temas, dos sentimentos e da natureza humanos. Com base nesse trecho do romance, a expresso como agua para chocolate faz referncia